Si eres entrenador, jugador o simplemente un apasionado del fútbol, sabrás que el trabajo físico es tan importante como la técnica y la estrategia. En este artículo, te explicamos un ejercicio ideal para mejorar la potencia aeróbica con balón, trabajar la circulación de juego y potenciar las transiciones ofensivas y defensivas.
Objetivo del ejercicio
El objetivo principal es realizar esfuerzos de alta intensidad durante 40, 50, 60 e incluso 80 segundos mientras se mantiene la posesión del balón. Al mismo tiempo, se trabaja la toma de decisiones, la precisión en los pases y la capacidad de transiciones rápidas entre defensa y ataque.
Espacio y número de jugadores
Este ejercicio puede adaptarse según el número de jugadores disponibles. Se recomienda contar con entre 12 y 15 jugadores, pero también es viable con 18 o 20. Se realiza en medio campo de fútbol 11 (equivalente a un campo de fútbol 7), aunque se puede ajustar a espacios más reducidos según las necesidades del equipo.
Distribución y desarrollo
- División del campo: Se separa el campo en dos zonas mediante una línea divisoria. En el centro de esta línea se ubican una o varias porterías pequeñas, que pueden estar centradas o en los laterales, dependiendo del enfoque que se quiera dar al juego (ataques por el centro o por las bandas).
- Ubicación de los equipos: Un equipo se sitúa en una mitad del campo y el otro en la otra mitad.
- Inicio del juego: El equipo con posesión del balón (por ejemplo, seis jugadores) comienza a circular el esférico mientras dos o tres jugadores del equipo contrario entran a presionar y recuperar el balón.
- Condiciones del ejercicio: Para que el equipo en posesión pueda progresar, debe realizar un número determinado de pases antes de filtrar el balón a la otra zona, ya sea por el centro o por las bandas, según la configuración elegida.
- Rotaciones y transiciones: Cuando el balón cambia de zona, los defensores deben moverse rápidamente a la otra mitad para presionar y recuperar, mientras que nuevos jugadores entran a defender. Esto genera un trabajo continuo y de alta intensidad.
Beneficios del ejercicio
- Mejora de la resistencia aeróbica: A través de esfuerzos prolongados con recuperaciones activas.
- Trabajo de la circulación del balón: Mejora la rapidez y precisión en los pases.
- Entrenamiento de transiciones: Se potencian las transiciones rápidas entre ataque y defensa.
- Mayor inteligencia táctica: Se desarrolla la toma de decisiones bajo presión.
Variantes para mayor complejidad
- Añadir porterías para finalización: Si se busca incluir una fase de definición, se pueden colocar dos porterías en los extremos del campo.
- Incluir transiciones ofensivas: Al recuperar el balón, los defensores deben salir rápidamente hacia la porteria contraria en un contraataque inmediato.
- Modificar el número de pases exigidos: Cuantos más pases se requieran antes de cambiar de zona, mayor será la dificultad para los atacantes y el desgaste para los defensores.
Conclusión y llamado a la acción
Este ejercicio es una herramienta clave para mejorar la condición física y táctica de cualquier equipo. Su versatilidad permite adaptarlo a distintos niveles y estilos de juego, asegurando un entrenamiento completo y desafiante.
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¡Nos vemos en el próximo entrenamiento!
